Dioni:llegaras lejos,eres genial,espero ver mas cuadros tuyos en tu blog,tienes otros preciosos,a ver si te decides y expones.Tu amiga Conchita.Tu pregon de la romeria,fantástico!me encantó.Besos a Jaime
Maravillosa propuesta a la vida. Aquí se cambia platar un ábol, algo tan manido, por la identificación de la barca (aquí somos mar y poco más). Y Jaime, tu hijo, son todos los niños. Y la barquilla es como la incubadora universal, que yace vacía a la espera del alumbramiento. La otra barca, como observan, tiene su matrícula porque está destinada al negocio. La de Dioni, sin embargo, es una invitación a la existencia, y está anclada en los buenos sentimientos y sirve de contrapunto del fragor del tabajo para que la familia los fines de semana naveque por los mares que les une.
El afamado pintor Evaristo Guerra visitando mi exposición.
Antonio Hidalgo, otro maestro de la pintura, también me ha visitado en la exposición.
DIONISIO PÉREZ
En este blog personal intento mostrar lo que es una de mis grandes aficiones: la pintura. Son cuadros, partes de mi, en los que intento plasmar mis sentimientos y emociones. Son una visión personalizada de la realidad... que me rodea
Si deseas ponerte en contacto conmigo, mi dirección de correo electrónico es: dioniper@terra.es Las obras aquí expuestas están a la venta, por lo que si estás interesado, no dudes en ponerte en contacto conmigo.
2 comentarios:
Dioni:llegaras lejos,eres genial,espero ver mas cuadros tuyos
en tu blog,tienes otros preciosos,a ver si te decides y expones.Tu amiga Conchita.Tu pregon de la romeria,fantástico!me encantó.Besos a Jaime
Maravillosa propuesta a la vida. Aquí se cambia platar un ábol, algo tan manido, por la identificación de la barca (aquí somos mar y poco más). Y Jaime, tu hijo, son todos los niños. Y la barquilla es como la incubadora universal, que yace vacía a la espera del alumbramiento. La otra barca, como observan, tiene su matrícula porque está destinada al negocio.
La de Dioni, sin embargo, es una invitación a la existencia, y está anclada en los buenos sentimientos y sirve de contrapunto del fragor del tabajo para que la familia los fines de semana naveque por los mares que les une.
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